Contaros que Zeus y yo Hera estamos creciendo.
Ya tenemos tenemos 10 meses, y Zeus es todo un grandullón,
ha crecido un montón.
Ella Hera es mas pequeñita pesa dos kilos menos que yo (Zeus).
Zeus se ha vuelto muy posesivo con migo (Hera), ya que me
echa de todo los sitios donde me pongo, pero lo más gracioso es que me vigila
mucho todo lo que hago.
La mamá humana dice que Zeus es mancho y como tal es muy
machista, aun que en el fondo sé que me quiere, ya que parece mi protector.
Los papas tienen un misterio muy grande con eso de las
cacas mías, por un lado dicen que la culpa es de Zeus que él es como si fuera
el dueño de todo, vaya lo que decíamos antes es un machista.
Hemos tenido dos areneros uno para cada uno, pues él, no
se conforma con uno tiene que usar los dos.
Yo Hera tengo la manía de hacer la caca al ladito del
arenero, y tengo súper intrigados los papas, ya que cuando era más pequeña no
me importaba hacerlo donde Zeus, en fin ya se han resignado y a tragar con
ello.
Por otro lado Zeus cada vez es más travieso, llega a
todas partes y no le importa en hacer trastadas, estaba cabezota en tirar un
cuadro colgado de la pared y hasta que no lo consiguió, no paró, el caso es que
no se sabe como lo hizo debió caer primero en el sofá y luego al suelo, no se
hizo ni un rasguño.
La lámpara de la mesa del comedor es de sube y baja pues
el tío como es tan largo y grande tira de ella como si lo hiciera una persona y
la baja, en fin cada día la mamá cuando se levanta dice a ver que ha hecho
este.
Yo Hera soy más buena a parte del problema que he contado
antes, no hago trastada, me gusta mucho que me coja la mamá, en su regazo,
hablo con los pajaritos cuando veo alguno, en fin una gatita buenísima y pequeñita.
A ver si Zeus se enmienda un poco y se vuelve más
relajado y bueno, ¡ no perdemos la esperanza!
Ya seguiremos contando.
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